Ya hace unos meses que tenemos en marcha los Parques de Salud en tres centros de la Fundació Ramon Noguera con el objetivo de fomentar la práctica deportiva entre las personas con discapacidad como fuente de salud y bienestar. Cesc Massó, técnico del área de salud y actividad física de la fundación, nos explica cómo sacar el máximo provecho a estas instalaciones.
“Existen muchas formas de entrenar, tantas como la infinidad de movimientos que es capaz de hacer toda persona. Cada movimiento que hacemos se asocia con un objetivo determinado, con un gesto en particular, ya veces sin pensarlo. Sin embargo, cada objetivo puede servir para mejorar los movimientos que necesitamos para completar nuestro día a día. Desde agacharnos con facilidad a alargar el brazo para coger algo en altura, o simplemente ser lo máximo de funcionales posible; en definitiva, precisó una ayuda o un apoyo lo más tarde posible.
Para que la persona sea lo más autónoma posible, debe ejercitar de algún modo su cuerpo. Tenemos a nuestra disposición infinidad de ejercicios, muchos sistemas de entrenamiento y muchos espacios para conseguir mejorar nuestras cualidades físicas básicas. Debemos trabajar y, siempre, con el asesoramiento de profesionales, a todas las edades y situaciones, la resistencia, la fuerza, la flexibilidad y la velocidad.
En la Fundación se ha implementado el recurso de maquinaria para realizar ejercicio físico, un total de 7 máquinas por cada espacio, concretamente en el centro ocupacional Montilivi y en las residencias de Sarrià y de Fontajau. Estas máquinas están pensadas y diseñadas para ejercitar y desarrollar todas las cualidades físicas básicas, pero acentuando los trabajos de fuerza y resistencia, sobre todo.
Hay unas máquinas para trabajar la mayor musculatura de nuestro cuerpo, otras para trabajar la movilidad articular y otras para trabajar a nivel cardiorrespiratorio.
En cuanto a las máquinas relacionadas con el trabajo de fuerza, cabe destacar que son máquinas donde la fuerza a realizar es la proporcional al peso de la persona que la utiliza. En este momento de fuerza, es necesario diferenciar el primer momento de esfuerzo (fuerza concéntrica) con el segundo momento de esfuerzo, el de retorno a la posición inicial (fuerza excéntrica). Este primer momento de fuerza es innato, y el 95% de los usuarios puede realizarlo. El segundo momento es lo que más nos interesa, la fuerza excéntrica. Este tipo de fuerza es la que debemos aprender a trabajar por controlar, para que las adaptaciones musculares y las mejoras sean significativas.
No menos importante es la planificación y la programación de la sesión de entrenamiento. El profesional debe regular el volumen, en cuanto a series y repeticiones, y la intensidad de esfuerzo para conseguir adaptaciones. Estas máquinas, ubicadas en un entorno saludable, nos permiten incrementar intensidades mediante la creatividad, aplicar sistemas de entrenamientos para conseguir objetivos relacionados con la pérdida de peso, con la rehabilitación, con una mejor longevidad, e incluso de liberación de tensiones . En definitiva, las opciones que nos dan podrían ser infinitas, basta con pensar bien los hitos y ponerse a entrenar.”
Las máquinas de los parques de salud son un recurso muy interesante al que hay que mostrarle seguridad, respeto y energía, ya que será la mejor forma de construir un bienestar físico, mental y social.”
Los Parques de Salud han recibido el apoyo de la Fundación ”la Caixa” que ha aportado 20.000 euros para el proyecto a través de CaixaBank.