Teniendo en cuenta que el niño aprende con la interacción con el entorno, aprende de lo que vive, de lo que ve, lo que siente y de la reacción del entorno ante sus actuaciones, es importante ofrecer vivencias diversas y compartir ratos de calidad.
La mejor herramienta de estimulación de lenguaje verbal son los padres, los hermanos, los tíos, los abuelos, los vecinos o los amigos, no las pantallas!
Qué podemos observar desde casa y cómo actuar?
- · Provocar intención comunicativa a través del juego.
- · A un niño que no habla no se le debe dejar de hablar. Aprovechar sus intereses, su juego para verbalizar lo que está haciendo. Los niños entienden palabras antes de producirlas.
- · Buscar ratos compartidos ante un cuento, ante un juego: jugando utilizando el lenguaje. Cantar canciones, escuchar canciones, mirar cuentos y hablar de las imágenes que se ven.
- · Jugar con los sonidos de los objetos que nos rodean (onomatopeyas).
- · Dialogar con la ayuda de imágenes de cuentos, de fotografías, intentando que las explicaciones sean cortas y con estructuras de frases repetitivas.
- · Aprovechar las situaciones cotidianas para verbalizar todo lo que se hace, todo lo que rodea al niño. Aprovechar momentos como el baño, la comida, el vestirse y desnudarse, ir en coche, ir de compras, etc. para conversar y describir lo que se está haciendo, nombrando el vocabulario de cada situación. Esto ayuda a adquirir vocabulario.
- · Si el niño se comunica con el gesto, verbalizar lo que quiere, convirtiéndose en su voz. No es aconsejable pedir que repita. Simplemente dar el modelo verbal de lo que no ha dicho.
- · Una vez interpretamos lo que nos ha dicho, devolverle con la frase correcta, por lo que le demostramos que la entendemos y, al mismo tiempo, le estamos dando el modelo.
- · No hablar repitiendo las palabras incorrectas que él dice. Haga siempre la corrección indirecta: utilice la palabra con la pronunciación correcta. No es necesario que lo repita.
- · Normalizar como habla, no hay que dramatizar, se trata de un proceso de adquisición. Hay que tener en cuenta el grado elevado de conciencia ante su dificultad; evitar comentarios tipo: "no lo dices bien", "así no", no hay que proteger, pero tampoco dar mensajes negativos ante cada intervención. Hay que poner en positivo el mensaje
- · En caso de dificultades, no comentarlas ni compararlas en presencia del niño ni frente a otros familiares y amigos.
- En el desarrollo del habla y del lenguaje de un niño intervienen muchos factores. Pero lo más importante son las respuestas que le da su entorno. En función de estas, se sentirá seguro; valiente para explorar, valiente para equivocarse y volver a intentarlo; valiente para explorar, valiente para equivocarse y volver a intentarlo.
Servicio de logopedia, CDIAP Gironès
